Android 4.3 Jelly Bean causa problemas en el Samsung Galaxy S III

El Samsung Galaxy S III vuelve a ser protagonista en esta página y es que si hace unas semanas ya os contamos cómo se iniciaba el proceso de actualización a Android 4.3 Jelly Bean, hoy conocemos que dicha puesta al día está generando una serie de fallos relativamente importantes, lo que ha ocasionado que desde Samsung hayan interrumpido el proceso de actualización hasta que se conozca la raíz del problema.

Uno de los terminales que más éxito tuvo en la pasada generación fue el Samsung Galaxy S III, quizás el gran triunfador. Uno de los motivos por lo que tiene tanto éxito es junto con sus prestaciones, por el soporte que desde Samsung brindan de forma constante a sus terminales.

Esto se pone de manifiesto en que a lo largo del pasado mes de octubre el Samsung Galaxy S IIIcomenzó su actualización a Android 4.3 Jelly Bean, la penúltima versión de Android disponible para la gran generalidad de terminales. El exitosos terminal se saltaba una versión de Android, la 4.2, ypasaba de Android 4.1.2 Jelly Bean a la citada 4.3.

Una gran noticia para los poseedores de este gran terminal que en bastantes casos con el paso de los días y una vez se ha asentado la ROM, está dando más quebraderos de cabeza de los que en un principio serían deseables.

Desde que la actualización comenzó han pasado unas semanas, pero ya ha tenido que detenerse debido a las múltiples quejas que están manifestando los poseedores del terminal de Samsung, los cuales hablan de distintos problemas que afectan a la estabilidad y funcionamiento general del terminal, habiendo experimentado una importante perdida de calidad en el uso diario.

Al parecer y tras actualizar a la versión Android 4.3 Jelly Bean los teléfonos afectados están experimentando problemas de autonomía, conectividad Wi-Fi, deficiencias en la función de bloqueo/desbloqueo, fallos en la pantalla a la hora de detectar las pulsaciones o cuelgues de aplicaciones. La única solución para poder subsanar estos errores temporalmente es al parecer el sacar la batería del dispositivo y volver a colocarla.

No son los únicos problemas, pero si los más importantes y los que más quejas están provocando. Tal ha sido el número de incidencias que la actualización para el Samsung Galaxy Note II, que iba a seguir un proceso similar, ha sido paralizada sin fecha definitiva para la reanudación en tanto en cuanto no se subsanen los problemas que parece ser están afectando al Samsung Galaxy S III.

Samsung se ha caracterizado por mimar sus terminales, al menos los tope de gama, con sucesivas actualizaciones que los han mantenido al día, en casos tan destacables como el Samsung Galaxy S II. Esta actualización ha coincidido el tiempo con la de otro terminal, el HTC One, que ha visto llegar Android 4.3 Jelly Bean a sus circuitos en una actualización sí ha mejorado el funcionamiento general optimizando el funcionamiento del terminal un poco más si aún cabe.